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Hay muchas formas de enseñar la literatura española de los siglos XIX y XX, pero seguramente pocas tan creativas, originales y estimulantes como el proyecto Los pliegues del tiempo: territorios desde la palabra, creado por Mercedes Ávila, profesora de Lengua castellana y literatura del colegio Santa Teresa de León, para los alumnos de 4º de la ESO. Un trabajo que ha sido reconocido como Premio Nacional eTwinning 2022 por el Ministerio de Educación en la categoría de Secundaria, por ser multidisciplinar, por su innovación y por la consecución exitosa de los objetivos pedagógicos que el proyecto tenía, así como la integración curricular del mismo.

eTwinnig es la plataforma educativa y colaborativa a nivel europeo en el que los docentes de centros de todo el continente se ponen en contacto unos con otros para crear diferentes proyectos educativos. En el caso de Los pliegues del tiempo, que se desarrolló a lo largo de todo el curso 2020/2021, participaron en total cinco escuelas europeas —dos españolas, dos italianas y una de Bulgaria—, lo que suma un total de 191 alumnos de tres países diferentes trabajando y cooperando juntos durante nueve meses. 

“La idea es que el alumno sea el protagonista de su aprendizaje” explica Mercedes Ávila. “Se trata de fomentar la creatividad, la autonomía, la responsabilidad y el compromiso de trabajo con otros”. Para conseguir tales propósitos, esta profesora de Lengua castellana y literatura no estaba sola, pues sus compañeros de los otros centros participantes en el proyecto colaboraron con ella activamente, reuniéndose una vez al mes para fijar objetivos y coordinarse para llevarlos a cabo. Para Los pliegues del tiempo, se crearon equipos internacionales de todos los países implicados, donde cada profesor era el responsable de un equipo. 

“Un proyecto de estas características lleva muchas horas de trabajo; es importante encontrar a gente que se implique y se comprometa” cuenta Mercedes Ávila. En el caso de esta docente, suele colaborar con las mismas personas por la confianza y su buena predisposición a la hora de trabajar. Además, en estos años donde la movilidad ha estado reducida a consecuencia de la pandemia, los proyectos eTwinning como Los pliegues del tiempo han sido más importantes que nunca para seguir manteniendo esa relación de confianza ya que “han permitido abrir las puertas y no perder esa parte de la comunicación con otros países”. 

En qué consiste el proyecto

Los pliegues del tiempo: territorios de la palabra, es un viaje por la literatura española de los siglos XIX y XX a través de tres misiones en las que los alumnos debían participar activamente para completarlas. 

La primera misión o bloque, dedicada al Romanticismo y titulada Bosques y brumas, buscaba acercar al alumnado este movimiento literario, para lo que iban a emprender un viaje y tenían que escribir una carta de despedida diciendo a su destinatario que emprendían este emocionante recorrido por el Romanticismo. Esta primera misión fomentaba la competencia lingüística y, al mismo tiempo, acercaba a cada estudiante, de forma imaginativa y amena, a los autores, temas y características de dicho movimiento. Y, como para todo viaje lejano, era necesario el uso de un pasaporte, que tuvieron que diseñar cada uno y hacer una presentación explicando quiénes eran y qué podían aportar al grupo. 

El viaje continuaba en tren por el Realismo, protagonista del segundo bloque, donde iban recorriendo distintos territorios y geografías que los alumnos debían describir utilizando el estilo de los autores realistas. En esta etapa del proyecto, se acercaron también al periodismo del siglo XIX y los géneros periodísticos, formando una redacción en la que cada estudiante tenía un rol —director, maquetador, redactor— y elaboraban portadas de periódicos como en la época. Esta aproximación al periodismo y a trabajar con la información también fue una buena lección sobre el uso de las noticias falsas y la manipulación, un problema que continúa existiendo hoy en día. 

La etapa final comprendía la Modernidad del siglo XX que recorrieron a bordo de un coche de carreras y donde trabajaron las vanguardias a través de caligramas —una especie de poema visual en el que el texto forma una imagen conceptual—. También estudiaron la importancia de la igualdad de la mujer y el papel fundamental de las escritoras del siglo pasado, como las autoras de la generación del 27, las llamadas “sin sombrero”, con las que hicieron un álbum de recuerdos. 

Cada una de estas misiones concluyó con una evaluación, que ha sido un hilo conductor de todo el proyecto: la inicial, para conocer las expectativas sobre el mismo; la intermedia, para hacer análisis de cómo se iba desarrollando y reorientar el proyecto; y la final, en la que los alumnos valoraban lo que les había aportado la realización del proyecto. Además, para cada misión los estudiantes tenían que hacer una síntesis de esta trabajando una técnica fotográfica conocida como knolling, donde conceptualizaban y plasmaban, de manera creativa, todo lo aprendido en cada una de ellas. A modo de conclusión, cada estudiante tuvo que escribirse una carta a su yo futuro y contarle cómo se veía dentro de unos años. 

Cada uno de los colegios participantes realizó las mismas actividades. El proyecto era curricular para los dos colegios españoles y de segunda lengua en los de Bulgaria e Italia, pero era exactamente igual para todos los alumnos, y se comunicaban en español. “Aunque el proyecto sea en lengua española tienes que entender cómo trabajan los otros” cuenta Mercedes Ávila, que en Los pliegues del tiempo ha trabajado en valores como la convivencia, el respeto, el valor de lo diferente y la importancia de abrazar otras culturas. 

Premio Nacional eTwinning 2022

“Para nada pensé que me lo iban a dar porque había muchísimas solicitudes” explica Mercedes. La profesora ni siquiera tenía intención de presentarse a este premio; simplemente fue siguiendo los pasos una vez se finaliza un proyecto eTwinning: solicitó el sello de calidad nacional cumpliendo los requisitos que se le exigían, teniendo que demostrar que se han trabajado ciertos ítems —la documentación, la difusión que se ha hecho del proyecto en las redes sociales, etc.— así como presentar evidencias de todo el trabajo realizado. Además, se compartió como buena práctica en el Centro de Formación de Profesores de León.

Cumplidos todos los requisitos, Los pliegues del tiempo obtuvo la máxima calificación posible, de 25 puntos sobre 25. Superado el trámite, Mercedes Ávila solicitó el sello de calidad europeo que, de nuevo, le fue concedido sin problema. 

Podría haberse detenido ahí habiendo cumplido los objetivos, pero el proyecto era demasiado bueno como para no intentar concurrir al Premio Nacional eTwinning 2022. Así se lo hicieron saber a Mercedes Ávila sus compañeros, que la animaron a que presentara la solicitud, convencidos de la calidad del proyecto. 

Presentado el proyecto en tiempo y forma, con todos los apartados y requisitos debidamente cumplimentados, Los pliegues del tiempo fue uno de los proyectos que figuraban en la lista de admitidos para concurrir a los premios. 

Otorgado por el Ministerio de Educación y el INTEF (Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado), el Premio Nacional eTwinning es un reconocimiento a los doce mejores proyectos nacionales realizados en esta plataforma; y se divide y reparte por categorías: dos para Educación Infantil; tres para Primaria; tres para Secundaria; dos para Bachillerato y dos para Formación Profesional (FP). 

El Ministerio valoró Los pliegues del tiempo como un proyecto pedagógico innovador que acercaba creativamente la literatura mediante un uso excelente de las TIC (Tecnologías de la Educación y la Comunicación) y por su carácter diciplinar. Esto le valió ganar en la categoría de Secundaria, en la que competía. 

“Es muy importante para el desarrollo profesional del docente el que te otorguen este premio” cuenta Mercedes, que recientemente recibió el galardón de manos de la propia ministra de Educación, Pilar Alegría. El proyecto, además, también ha sido reconocido en los Premios Educación de la Junta de Castilla y León.

Tras Los pliegues del tiempo, la profesora desarrolló en el curso 2021/2022 otro proyecto eTwinning, llamado Sabelotodos: Literatura y cultura en juego, una especie de Saber y Ganar donde se conectaban por videoconferencia con los otros colegios para hacer el concurso; y en el curso actual en otro proyecto bautizado como Luces y sombras. Porque estos proyectos no se hacen para recibir premios, que son una consecuencia al trabajo bien hecho asegura Mercedes, que no quiere acomodarse sino “buscar cómo innovar e introducir experiencias nuevas en el aula”. 

Sus proyectos, además, tienen el mayor reconocimiento posible: el de los alumnos. De hecho, los de los cursos inferiores a 4º de la ESO ya le preguntan que cuándo hará un proyecto eTwinnig con ellos. Y ese, sin duda, es el premio más grande que un docente puede recibir.